Dome de Neige (4.015m)

Dome de Neige des Ecrins (4.015m)

El Dôme de Neige des Écrins (4.015 m) es una montaña en los Alpes franceses, en el macizo des Écrins. Esta cima se encuentra al pie de la Barre des Écrins, en el lado del Isère; se hace un recorrido por un glaciar sin grandes dificultades técnicas - salvo la rimaya de la cumbre, aleatoria.

4:30 de la madrugada, al final nos hemos decidido por subir a la Barre des Ecrins, parece ser que el tiempo nos respetará. No hemos sido los primeros en desayunar, así que casi mejor esperar a que salgan todas las cordadas y poder ir más tranquilos sin tanto jaleo de gente, por lo menos subimos una treintena de personas sino más.

Nada más bajar al glaciar nos encordamos aunque esta parte no es peligrosa, nunca se sabe donde estarán las grietas, además mejor llevar todos los achiperres puestos que en la mochila, que nos pesa un montón. Tenemos pensado bajar directamente hasta el parking sin pasar por el refu, por lo que vamos cargados con todo.

Durante un buen rato vamos con los frontales y aparentemente parece que somos los únicos o los últimos en subir. La dirección a seguir es fácil, vamos siguiendo una trinchera, una huella tan pisada que es imposible perderse.

Tenemos frente a nosotros la larga lengua del glaciar, que en esta sección presenta un terreno "muy amable". No tiene gran desnivel, aunque son unos kilómetros.

Frente a nosotros comienzan a aparecer la Barre des Ecrins y la Dome de Neige. Impresiona el paredón por donde tenemos que subir, lleno de grietas, rimayas y seracs.

Comenzamos a ver gente. Nos fijamos que a la derecha, como hormiguitas, suben por la primera pala un grupo de personas en fila, nos sorprendemos de que sean tantos..

Flipando a colores con los seracs.
Por fin, llegamos bajo la pared (3.300m de altitud) mientras el sol colorea los seracs de tonos rosáceos hacemos una parada para beber algo y buscar un serac o escondite entre las piedras y bloques de hielo caídos de una avalancha, donde poder dejar escondidas cosas de la mochila, como ropa o comida que no nos harán falta.

Aquí comienza un duro ascenso glaciar salvando seracs e impresionantes grietas por puentes de nieve. La pendiente es considerable en el tramo inicial donde se pega al lado derecho de la pared para luego subir en diagonal hacía la izquierda hasta la vertical de la Barre des Ecrins, ahí se gira a la derecha y se realiza un flanqueo con buena huella y se llega a los pies del último repecho, donde se salva una grieta (todavía bien cerrada).

Un vistazo hacia atrás para contemplar la salida del sol.

Ahora con menos peso mucho mejor; comenzamos a subir por la derecha evitando así el tremendo serac que tenemos a nuestra izquierda.

Detrás comienzan a asomar la Meije y el Roche Faurio (que era en un principio el que queriamos subir) entre otros. Fascinante los tonos que adquieren con la salida del sol.

El glaciar Blanc va quedando abajo.

Las hormiguitas cada vez están más cerca, a este ritmo les vamos a alcanzar pronto. Los dos solos avanzamos bastante deprisa y ya hemos adelantado a alguna cordada.

Ahora toca la travesía horizontal por debajo de la rimaya de la Barre des Ecrins, menudo ambientazo hay aqui arriba! Vemos como algunos le dan un tiento a la pared de la Barre, el resto de hormiguitas seguimos hacia el Dome.

Nos cruzamos en algún punto crítico con alguna cordada madrugadora que ya regresa, aunque poniendo cuidado con las cuerdas no hay mayor problema.

 

No podemos dejar de mirar hacia la Meije.

Vistas desde el estrecho col de Lory.

Unos poco metros para la cima.

Foto de cima con la barre y el Pico Lory detrás

Volvemos sobre nuestros pasos, admirando el entorno y con precaución. Impresionante vista de la Barre y el Pic Lory.

Tenemos que apresurarnos en bajar, el solestá pegando en el glaciar y en breve calentará los puentes de nieve y se pondrán más peligrosos.

Ya vemos el refugio encima del espolón rocoso. Nosotros, que ya hemos recogido las cosas que dejamos escondidas, seguiremos hacia abajo, no pasaremos por el refugio, que a estas alturas subir esos 100m no apetece nada...

Una mirada hacia el glaciar que dejamos atrás, ahora nos cambiaremos de nuevo de ropa y nos pondremos las zapatillas de trekking, que las botas rígidas me han dejado las ampollas en carne viva y continuaremos bajando los mil y pico metros de altura que nos separan del coche. Como duelen las ampollas! ,pienso.

Al regresar al camping de Allifroide se desencadenó una impresionante tormenta. Esta es la Gite d'etapa, Le Mendi, que descubrimos al regresar al camping de Allifroide, donde finalmente dormiríamos esa noche. Después de subir hasta el Dome y bajar del tirón, estabamos demasiado cansados como para volver a plantar la tienda y encima lloviendo a cántaros..